En el boxeo, no todo es fuerza bruta. La técnica, la disciplina y el equipo correcto hacen la diferencia, y cuando hablamos de equipo, los guantes lo son todo. Elegir los guantes adecuados no solo mejora tu rendimiento, también cuida tus manos y eleva tu nivel de entrenamiento.

En Miyagi sabemos que cada boxeador tiene su propio estilo, peso, edad y objetivos. Por eso te traemos esta guía práctica, ligera y con puro sabor colombiano para que sepas cómo elegir tus guantes según tu nivel, cómo cuidarlos para que duren, y cuáles son los más recomendados para vos. Porque si vas a subirte al ring o al saco, ¡más vale que sea con los guantes indicados!

¿Cómo saber qué guantes de boxeo son los mejores para mí?

Lo primero es reconocer tu nivel. Si apenas estás empezando, lo ideal es buscar guantes cómodos, que te protejan bien y no te cansen tan rápido. Los de 10 a 14 onzas son una gran opción para entrenamientos básicos y sesiones de técnica. Pero si ya llevás rato dándole al saco o hacés sparring regularmente, podés pasarte a guantes más livianos o más acolchados, dependiendo del enfoque de tu entrenamiento.

La talla también depende de tu peso. Por ejemplo, alguien que pesa menos de 70 kg debería usar guantes entre 10 y 12 onzas. Si pesás más de 80 kg y hacés sparring, lo mejor es que uses de 14 o hasta 16 onzas para cuidar tanto tus manos como a tu compañero.

¿Qué tipo de guantes existen y para qué sirven?

En el mundo del boxeo, no todos los guantes sirven para lo mismo. Hay modelos para entrenar, para hacer sparring, para competir o incluso para que los niños se inicien en este deporte. Por ejemplo, los guantes de 6 u 8 onzas son ideales para niños y adolescentes porque son ligeros y cómodos.

Los de entrenamiento, entre 12 y 14 onzas, son perfectos para sesiones de saco o técnicas mixtas. Y si lo tuyo es la competencia, los de 8 o 10 onzas te darán mayor velocidad y precisión, aunque con menos acolchado. Para sesiones intensas o sparring con oponentes más pesados, algunos boxeadores usan hasta guantes de 18 o 20 onzas. Eso sí: ¡la protección siempre primero!

¿Cómo cuidar mis guantes para que no huelan feo ni se dañen rápido?

Este es uno de los puntos clave. Un par de guantes puede durar mucho tiempo si los cuidás bien. Primero que todo: no los metás directo a la maleta después de entrenar. Abrilos bien, dejalos ventilar y secar a temperatura ambiente. Si los guardás mojados, empezarán a oler mal y el material se deteriorará rápido.

Después de cada sesión, pasales un paño seco por dentro y otro húmedo por fuera. Si querés, podés usar un spray antibacterial (¡nada de cloro ni ambientadores!). También podés meter papel periódico o toallas absorbentes por dentro para quitarles la humedad más rápido.

Y ojo: no los pongás al sol directo ni los metás a la lavadora. Eso solo hace que el material se agriete o pierda forma. Mejor tratá a tus guantes como a tu mejor aliado. ¡Porque lo son!

¿Un par de guantes es suficiente?

Si entrenás con frecuencia, lo ideal es tener al menos dos pares: uno para el día a día y otro para sparring o competencia. Así no solo los hacés durar más, también tenés siempre un par seco y listo para usar. Además, podés probar diferentes estilos y pesos hasta encontrar el que más se ajuste a vos.